martes, 16 de junio de 2009

UN PASEO EN EL AUTOBUS OBSERVANDO AL SER HUMANO

Foto by Ivelisse de Jesus ( Juan Dolio, Rep. Dom )



UN PASEO EN EL AUTOBUS OBSERVANDO AL SER HUMANO

Hoy a las 7 am he tomado el autobus local del Metro Dade . Amén de la
diligencia que iba hacer, tenía en mente escribir algo relacionado
con el comportamiento de los pasajeros, claro sin que ellos se
dieran cuenta de que iban a ser observados.

La diversidad de personas era bien definida, dado a que vivimos
en una Ciudad Cosmopolita; tampoco era extraño que los pasajeros
en su mayoría fueran hispanoparlantes.

Dado a nuestra experiencia, conocemos los tres tipos de cuerpos
humanos de acuerdo a su formación física, los cuales son:
"Ectmorfos, mesomorfos y endomorfos".

Los Ectmorfos tienen:

Los brazos y las piernas largas, sus manos son estrechas, largas
y sus pies son de la misma forma. Sus músculos son finos, su pecho
es estrecho y de la cintura hacia arriba son cortos.

Los Mesomorfos tienen:

De la cintura hacia arriba son largos, su pecho es grande, tienen
mucho más músculos y más fuerza.

Los Endomorfos tienen:

Un cuello corto, cara redondeada, cintura ancha y mucho mas grasa
en su cuerpo.

Ya conociendo lo arriba mencionado, cada pasajero que entraba,
yo lo iba clasificando por su forma del esqueleto ( claro todo secreto).
Luego con mucho disimulo, le echaba una ojeada a todos los pasajeros,
para ver su comportamiento individual: varios hablaban por el celular,
otros escuchaban música y parecían judíos orando en el lugar
de los lamentos, haciendo señales con la cabeza de que todo era
positivo, porque siempre decían que "sí ". De las dos Sras. con mucha
"juventud acumulada", una de ellas hablaba a solas, accionando con sus
manos como si estuviera enfrente a alguien en su imaginación.
Dos de ellos parece que anoche se fueron tarde a la cama y
aprovechaban el momento para dormir un poco.

Como era un bus local, casi en todas las paradas se paraba. Era
muy curioso que algunos pasajeros le exigían al chofer en una
forma no muy educada, la razón de su tardanza y que él era el culpable
de que el sol la estuviese castigando. Algunas féminas sus compañeros
la noche anterior no le cumplieron, porque sin el más mínimo escrúpulo,
lo expresaban con sus gestos. Un niño de pocos meses lloraba y vez
de darle un biberón, la madre decidió amamantarlo de la misma
forma que lo hicieron conmigo, directamente con una "lola"; ella
( la madre) de una manera muy natural se levantó su blusa y le puso
una de sus "lolas" en la boca del niño, no era de sorpresa para
nadie de que el niño dejara de llorar ( ahí me pude acordar
del proverbio antiguo que dice: " niño que no llora , no mama" ).

Era muy notorio que entre los pasajeros no existía, los principios más
elementales de la "documentación"acerca de ellos mismos ( el desconocimiento de no saber comer y no hacer ejercicios físicos).

Realmente
se dejaba notar un porcentaje muy alto de un 50%
" gorditos", 40%
obesos y un 10 % sus cuerpos estaban acorde proporcionalmente con su estructura física. Dentro de este bus, la
auto estima era muy pobre.


El amor a la vida estaba ausente; parecían como si fueran robots ó
marionetas sin hilos. Muchos, sus miradas eran lánguidas y las mismas
se iban yendo con la velocidad del viento al chocar con la estructura
del autobus.


Otros dejaban una visión formada en en su término corto de memoria, la
almacenaban con mucho anhelo, esperando a la noche para que dichas
imágines se desvanecieran durante su sueño nocturno, como cuando hervimos agua y el vapor se escapa.

Para mi fue una gran experiencia el haber participado en un estudio,
en donde el silencio ambiental va dejando sus rasgos como una
radiografía de quien es verdaderamente el ser humano. También
pude determinar que todos hemos nacido del mismo barro,
pero en diferentes moldes.

Ray Bueno
Miami, Fla. USA
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